Risa me da leer en la Wired un artículo que proclama que los medios le deben una disculpa al Dungeons & Dragons, estos yanquis no conocen la historia del rol en la España cañí y profunda, es decir la España que sale en la televisión y que nadie olvida.
La historia que empezó en 1994 cuando llegaba yo a mi casa tras unas partidas en el club de rol como siempre, mis padres en aquella época no entendían lo que era un juego de rol, lo remarcaba el hecho de que casi siempre me preguntaban al llegar "Has ganado hoy?" y yo respondía el típico, "en los juegos de rol nadie gana ni pierde", pero aquel dia la cosa era un poco mas seria y las preguntas fueron del plan de "pero alli que haceis?", a lo que siguió el que imagino sería el discurso similar en todas las casas donde habia un rolero, si dos locos matan a una persona por la calle, no tiene nada que ver con el rol.
Pero claro, es muy dificil ir contracorriente, es decir, contra lo que la televisión y los periódicos generalistas decian. Animados por las audiencias, desde sus púlpitos estigmatizaban a los jugadores de rol, en El Mundo podiamos leer perlas como la que rebuznaba alguien cuyo nombre no merece la pena mencionar:
"Los videojuegos, y seguramente también ciertos dibujos animados de la televisión, producen hemitrofia cerebral a medio plazo, pero los juegos de rol provocan necrosis fulminantes en los tejidos de la cabeza y del corazón. Ideados para imbéciles profundos, o bien para volver profundamente imbécil al que todavía no lo es"
La televisión, especialmente canales como Antena 3, emprendieron una cruzada contra los juegos de rol, y aunque luego se demostró que todo era una patraña, y que apenas jugaban al rol, ya daba igual, el daño estaba hecho.
Han pasado 20 años y desgraciadamente no se ha olvidado, hace poco un amigo de mi hijo de diez años venia a mi casa a jugar, entre consolas y muñecos sacamos un juego de mesa, el Talismán, el juego es una Oca vitaminada, en la partida pasó una cosa muy graciosa y es que los dos niños no paraban de caer en la casilla de la taberna, donde tiras un dado y te dice el efecto que te pasa, con la casualidad que salió varias veces la borrachera, los jugadores se pasaban de beber, y perdían un turno.
Esto originó muchas risas y todo el rato diciendo que si estaban muy borrachos, lo cual en aquel momento fué gracioso, pero a posteriori mi mujer me comentaba que si a ese niño en su casa le preguntaban que habia hecho, posiblemente iba a contar que habia estado jugando a un juego en el que estaban borrachos todo el tiempo. Ay!
Estuvimos dandole vueltas al asunto, y decidimos que para otra vez deberiamos preguntar a los padres de niños que vengan a casa si podían jugar a un juego de mesa, lo bueno, le decía yo a mi mujer, es que los padres no van a decirme que no nunca, porque cuando les dices un juego de mesa, piensan en los de siempre, el Monopoly, el Risk, o si son mas avanzados El Cluedo, juegos que están en la mente de todo el mundo cuando les hablas de un juego de mesa, aquí obviamente no jugamos a esos, Pitch Car, Catacombs, Gulo Gulo o Talismán suelen ser los más habituales.
Pero este razonamiento me lleva al final del artículo, ya que en un futuro no muy lejano tengo la intención de iniciar a mi hijo en los juegos de rol, los Dragones y los Hechiceros Malignos no se van a ir solos de estas tierras, y porqué no, alguna vez he pensado que quizás algún amigo de mi hijo se apunte, pero claro, al igual que en el caso del juego de mesa donde todo el mundo piensa en los clásicos, adivinad que cara me puede poner un padre/madre cuando le diga:
"- ¿Le importa que juguemos a un Juego de Rol con su hijo?"
No saber, el desconocimiento, el miedo, lo que durante muchos años dijeron, y siguen diciendo cuando les viene en gana en la televisión, han creado un estigma que no se va, el "Crimen del Rol" en este pais es la losa que llevamos durante muchos años, "los locos del rol" nos llamaban cuando nos veian por la calle, y ahora 20 años más tarde pensamos que ya nos la habiamos quitado, pero si
Asi que si a los yankis los medios les deben una disculpa, a nosotros el daño causado, que no va a ser reparado nunca, no se va a arreglar con una disculpa, la única salida sería vernos detrás de la Iglesia a las 12, traiga dos padrinos y yo llevaré los mios.
* (los roleros nunca mueren, solo se aletargan)
Gran artículo. Tienes toda la razón, el estigma del "asesino del rol" jamás nos abandonará. El otro día organicé una partida de Talismán con mi hijo y dos sobrinos (total 7, 8 y 12 años, yo hacía de "narrador" para no alargar la partida). La partida fué un exitazo y creo que he abierto ahí un "butrón" hacia los juegos de fantasía, pero me da reparo todavía hacer un "príncipe valiente" ,por ejemplo, sólo por el hecho de decirle a mi hermana y mi cuñado que vamos a "jugar a rol". Porque igual lo ven divertido la primera sesión, pero como algún niño se ofusque/obsesione/cabree/algo, seguro que en seguida va a salir a relucir que "es culpa de jugar a rol". Y no me apetece...
ResponderEliminary en ese aún son familia y puedes ver por donde entrarles etc, ahora imagina con padres de un compañero de clase...
EliminarPues te animo a meterles el veneno de las historias, las aventuras, el compañerismo y los dragones cuanto antes.
ResponderEliminarMis hijos tienen ahora 28 26 y 24 años. Dos de ellos siguen jugando a rol, y lo más importante leen y tienen espíritu crítico ante los vendedores de elixires políticos o comerciales.
Sus amigos de colegio siguen jugando a rol con ellos, con mayor o menor intensidad. Y todos me piden que les haga una partida de vez en cuando, lo que me mantiene conectado transgeneracionalmente y me permite llevarlos por el morro de vez en cuando entre risas.
Recordar la muerte de algún personaje querido por ellos o algún npc divertido hace familia, crea buen rollo con los amigos de siempre y resulta una experiencia por la que ha valido la pena vivir.
Si enseñarle al mio va a ser que sí, la cosa es que para un JDR hace falta mas gente, y ahí es donde veo el escollo :)
EliminarA mi lo que más me escama es que el rol no se perciba igual que los videojuegos, que son más directos en el mensaje y normalmente se supervisan menos. Es decir, tu puedes dirigir un juego de rol, suavizarlo, cambiar reglas, etc... Un videojuego, si es violento o transmite un mensaje poco adecuado, o juegas o no, y si dejas jugar a un niño/chaval, normalmente no lo supervisas, porque el medio en que se desarrolla apenas necesita requisitos, poco más que atender, y al adulto le da un tiempo precioso en el que no tiene que atender al chaval.
ResponderEliminarHay un dicho que reza: "Donde todos piensan igual, ninguno piensa mucho" y ese se puede aplicar aquí. Es más sencillo temer por desconocimiento que "arriesgarse" a que al chaval le pase algo (insisto, desarrollando algo que está bajo el control de un adulto, a esas edades)
Solo haremos una crítica al artículo. Porque no juega ya tu niño a rol con la de joyas que hay para peques. Yo recuerdo que un alarde de chulería decidimos bautizar el club de rol Cómo La peña chunga por suerte siempre tuve una madre que creyó mi argumento de debemos prohibir superman si un niño disfrazado de tira de una azotea.
ResponderEliminarsi, bueno, yo no me quejo de lo de mis padres, pero claro en el noventaitanos yo ya tenia 20 anyos, con lo q poco me podian apretar las tuercas, pero si llego a tener 14 y me pilla esta movida, igual la cosa hbiese sido diferente.
EliminarY si, al ninyo le tengo q poner algo, el problema es jugar uno solo, no lo acabo de ver claro... y no quiero hacer una eperiencia aburrida de una partida de rol :)
si, bueno, yo no me quejo de lo de mis padres, pero claro en el noventaitanos yo ya tenia 20 anyos, con lo q poco me podian apretar las tuercas, pero si llego a tener 14 y me pilla esta movida, igual la cosa hbiese sido diferente.
EliminarY si, al ninyo le tengo q poner algo, el problema es jugar uno solo, no lo acabo de ver claro... y no quiero hacer una eperiencia aburrida de una partida de rol :)